¡Ya se ha producido el
evento del año y del siglo!
¡Will & Kate se han casado! Y ni ha hecho falta hacer uso de la operación Pumpkin ni nada, se han dado el sí quiero y todo ha sido maravilloso.
Podría hablar, comentar y criticar tantas cosas que tienen que ver con la boda... que no lo voy a hacer, o por lo menos de una forma tan concreta.
A grosso modo puedo deciros que:
El principe Felipe iba guapísimo no como Leticia, que estaba mas sosa que un bocadillo de arroz blanco. Sinceramente, para el cuerpo que tiene, y esa carita... en vez de ese "gorro" porque no se puede definir ni como sombrero ni tocado, hubiese elegido este último: ¡un tocado le hubiera quedado genial, y le hubiera dado la gracia que le faltaba en el vestido!.
Victoria y David Beckham... impecables, por supuesto. Vicky llevaba un tocado maravilloso, si es que todo lo que se ponga le queda bien, ¡qué rabia!.
Camila Parker y Carlos de Inglaterra, iban muy en su línea: sin gracia y sin elegancia.
Kate, ahora Duquesa de Cambridge por orden de la Reina, iba radiante. ¡Qué emoción! Mis predicciones fueron acertadas, y finalmente fue Sarah Burton con la firma de Alexander McQueen quien diseñara la obra de arte que Kate llevara por vestido.
El vestido, de líneas clásicas y toque vintage (tal y como dicta la firma McQueen), estaba compuesto de un cuerpo de encaje, escote de corazón, y una pomposa cola de lineas puras que acababa a los 3 metros. Un vestido, a mi opinión, muy pero que muy acertado, nada ostentoso... ¡sencillez hasta en el ramo! Me encanta esta chica... Y como colofón: la tiara, con la firma de Cartier y elaborada en 1936 como regalo de Jorge VI a la reina madre (bisabuela de William y Harry).
El vestido es un reflejo actualizado del que luciera Grace Kelly en su boda, en 1956. El cual tomaba las mismas formas que el de Kate.
Me gustaría destacar algunas imágenes, y con las que me quedo de entre todas las que se produjeron durante la ceremonia. Creo que son las imágenes con las que se podría definir el evento.
Kate, ahora Duquesa de Cambridge por orden de la Reina, iba radiante. ¡Qué emoción! Mis predicciones fueron acertadas, y finalmente fue Sarah Burton con la firma de Alexander McQueen quien diseñara la obra de arte que Kate llevara por vestido.
El vestido, de líneas clásicas y toque vintage (tal y como dicta la firma McQueen), estaba compuesto de un cuerpo de encaje, escote de corazón, y una pomposa cola de lineas puras que acababa a los 3 metros. Un vestido, a mi opinión, muy pero que muy acertado, nada ostentoso... ¡sencillez hasta en el ramo! Me encanta esta chica... Y como colofón: la tiara, con la firma de Cartier y elaborada en 1936 como regalo de Jorge VI a la reina madre (bisabuela de William y Harry).
El vestido es un reflejo actualizado del que luciera Grace Kelly en su boda, en 1956. El cual tomaba las mismas formas que el de Kate.
Me gustaría destacar algunas imágenes, y con las que me quedo de entre todas las que se produjeron durante la ceremonia. Creo que son las imágenes con las que se podría definir el evento.
En primer lugar, las miradas de complicidad que se dedicaron la pareja desde que ella llegara al altar.
Fue una escena preciosa, en la que reconozco que me emocioné: Kate, del brazo de su padre se acercaba al altar, donde Harry acompañaba a su hermano Will, quien no quiso girarse al saber que Kate se encontraba en la iglesia, por lo que Harry se giro... la miró, sonrió y le dijo a su hermano: "Ya está aquí".
Cuando ambos se encontraron en el altar, se intercambiaron miradas y sonrisas, y Will le dijo: "Estas preciosa".
El momento anillo protagonizó una de las anécdotas de la ceremonia, y es que a Kate no le entraba... al menos al principio, pero cuidadosamente logró ponérselo. ¡Qué apuro!
Además, la novia decidió (al igual que en su momento la princesa Diana), no incluir el voto de obediencia a su marido, haciendo un cambio de obediencia por "amar y reconfortar".
Y llegó el esperado momento: el beso.
Muchos han querido hacer una comparativa de el beso protagonista del día de hoy, con el que en su momento tuvo lugar en el mismo balcón hace 20 años: el beso de Carlos de Inglaterra y la Princesa Diana de Gales.... De verdad que no veo donde ven la similitud, más allá de la ubicación. La Will & Kate se dieron un beso de manera "mutua" por así decirlo, no como el de los padres de él, que si no es porque Diana tomó la iniciativa, el orejudo ni se inmuta. ¡Pero qué mal me cae Carlitos!.
Pues bueno bloggers, por el momento no creo que sea necesario comentar más, principalmente porque seguramente estaréis saturados ya de tanta boda y tanto comentario....
Sin embargo, por si todavía queda alguien que no haya visto alguna imagen de la ceremonia. Os dejo con un video que he montado a modo de resumen en 4 minutos. ¡Espero que lo disfrutéis!
Mientras tanto... os dejo con mis tocados favoritos.
XOXO
1 comentario :
uffff! he de dicrepar contigo jeje me pareció que Victoria Beckham iba mas de entierro que de boda y que el tocado había tenido que ponerselo con superglue como un pegote en la frente ¡por lo demas me ha encantado la boda! y sí, Letizia sosita sí iba.... besos!
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