ENDORPHINS

Se suele relacionar el buen estado de ánimo, el "buen rollo"- la felicidad en sí - con las endorfinas ♫♫♫. 

Pues bien, yo hoy las debo tener por las nubes porque no puedo estar más feliz y contenta. 
¿Por qué? Os preguntaréis... 

Haciendo uso del antiguo proverbio chino: 
"Una imagen vale más que mil palabras"
...

No diré que han sido los 3 mejores meses de mi vida, aunque podría decirlo. 
Es más coherente y realista, para mí, decir que han sido los 3 meses que han
 marcado un antes y un después en mi forma de vida, en cómo ver 
las cosas, en afrontarlas. ¿Qué tal si os cuento mi experiencia?

Todo comenzó con un concurso en Facebook que realizaba un nuevo centro 
de entrenamiento deportivo llamado Health Space. Cuando leí las bases 
del concurso ni me lo pensé... ¡necesitaba conseguirlo! Esa era una 
gran oportunidad... MI OPORTUNIDAD. 

Participé, recibí todo vuestro cariño y apoyo a través de más de un centenar 
de 'Likes' que me otorgaron el premio de ese concurso: un 
programa de reducción de peso. 
Hasta aquí lo "fácil", ¿y después qué?

Después comenzaron los entrenamientos, los sudores, las lágrimas 
(todas de risa, ¡eh!) y algún que otro susto. Nunca olvidaré el primer día 
de entrenamiento, donde el esfuerzo sucedió al cansancio y de ahí al desmayo
 y los vómitos solo hubo unos segundos de diferencia. 
Era algo normal, no hay de qué alarmarse.

Empecé a entrenar 3 días a la semana, lunes-miércoles-viernes. 
Pasado el primer mes aumentaron los entrenamientos a 4-5 sesiones semanales. 
Y al par de semanas ya empecé a entrenar de lunes a viernes. 
Entrenar es adictivo, mi cuerpo me lo ha hecho saber. 

Cada vez quería más,  habían fines de semana en los que llegaban las 
9 de la noche  y me veía sentada frente al TV o al ordenador y decía... 
¿QUÉ? ¿CÓMO? 
E inmediatamente me ponía las zapatillas y salía a caminar. 

En cuanto a las comidas, ya lo habéis visto -sobre todo a través de Instagram- que mi dieta ha sido de lo más normal. Sin locuras ni restricciones excesivas. Prohibir es una palabra feísima, y en Health Space lo saben muy bien. Intentar comer sano, sin abusar de sal, ni azúcar, ni aceites, ni salsas. Lo dicho, lo normal. 

No me he privado de nada. He aprendido a ver qué cantidades son las más adecuadas. 
Ahora sé qué necesita mi cuerpo para funcionar bien, y eso es algo que solo puedes aprender 
poníendolo en práctica. De nada sirve que os diga "comía 40gr de pasta integral con 50gr de...". 
NO
Eso está bien a modo de orientación, pero realmente no puedo sentar cátedra sobre mi dieta.

Mi recomendación: acudir a un/a nutricionista o endocrino/a. 
Eso os ayudará a conocer qué dieta se ajusta más a vuestro cuerpo y estilo de vida. 

Esta es una de las preguntas más recurrentes en mi cabeza. 

Pero de nada sirve ya lamentarse por haber tardado tanto, 

lo importante es en el punto en el que me encuentro ahora. 

Feliz y optimista 

No quiero parar. He descubierto el bien que le hace el deporte a mi cuerpo y a

 mi mente. Además, he tenido la maravillosa suerte de dar con un entrenador

 que es un sol, que me aguanta sin poner malas caras (no siempre) y que

además es partícipe de todas las locuras que se me ocurren. Gracias a sus

 consejos y su confianza en mí, este programa ha sido mucho más sencillo.

Han sido un pilar fundamental en este proceso.

Entrenar con diversión es posible gracias a este grupo de 

locas/os que nos juntamos a las 20h en Health Space. 

Creo que es imposible entrenar a esa hora y no reír a carcajada limpia al menos 3 veces. Entre los gritos que pegamos cada vez que hay que hacer algo que no nos gusta, las miradas que nos echamos, los ruidos que hacemos y nuestros lemas... ¡la situación no puede ser más cómica!

"Muerte, destrucción, Apocalipsis, potaje berros, escaldón..."

"Si hombre Isaac, nosotras eso no lo hacemos..."

"Noe, ¿qué vas de alumna aventajada?"

"Murga, ¡cállense ya!"

"¿Cuántas series llevan?... No me mientan..."

"Cristina, deja de reírte"

"Las chicas de las ocho ovulan 3 veces en semana: lunes, miércoles y viernes"

"¿En seeeeeeerio?"

"Ya hicimos las 3 series... (¡mentira!)"

"Elena... tu haz lo que quieras, como siempre"

"Saca la pesa de ese agujero negro... o no me peso"

"Ofelia, de camarones, lapas y garimbas te puedes hartar"

"1, 2, 3, 8, 17, 30... ¡terminé!"

"Laura, deja de quejarte.. ¿qué te duele ahora?"

"Las chicas de las ocho no sufren"

Tonterías varias que hacen que el entrenamiento sea menos costoso.

Pasaría por esta experiencia una y mil veces más. 

Me lo he pasado genial y he logrado el objetivo principal: adelgazar 10kg, concretamente -10'5kg. 

Podrían haber sido más kilos, pero -como os he dicho- 

con la comida no me he privado ni una sola vez.

He conocido a gente maravillosa, he compartido momentos divertidísimos,

 también preocupaciones, dolores, pero sobre todo he disfrutado. 

Para que os hagáis una idea de lo contenta que estoy conmigo misma y con

 cómo lo he conseguido, me he propuesto seguir entrenando. Y más que 

una propuesta es una certeza. No lo haré por mi cuenta, seguiré con Health

 Space. Porque enganchan, porque te hacen sentir bien y porque yo ya 

me siento parte de esa pequeña familia de "Locos por el entrenamiento". 

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Y a vosotros/as os animo a probar esta droga legal que es el deporte. 
Porque, aunque al principio cuesta, después es maravilloso y ya no te imaginas
 la vida cotidiana de otra forma. Os leo en los comentarios... ¡muacks!

XOXO